Adulterando con alegría

 Por Farid Matuk



El Producto Bruto Interno (PBI) es una variable de suma importancia porque da una imagen agregada del grado de prosperidad o deterioro de una economía. El PBI como tal está compuesto de varios sectores, los cuales se miden de manera directa o se imputan de manera indirecta. Hasta el 2006 se medía de manera directa: Agricultura, Pesca, Minería, Hidrocarburos, Manufactura, Electricidad y Agua. Mientras que la imputación correspondía a: Construcción, Comercio, Transporte, Comunicaciones, Financiero, Seguros, Servicios a empresas, Restaurantes, Hoteles, Servicios Gubernamentales, y resto de otros servicios.

Hasta el 2006, el proceso de imputación era transparente porque la hoja de cálculo en la que se aplicaban los procedimientos matemáticos estaba publicada en internet y permitía a cualquier especialista reproducir los resultados oficiales. A partir de 2006, los procedimientos de imputación fueron modificados en secreto, y recién hechos públicos en 2009, pero las hojas de cálculo correspondientes a los años previos al 2006 fueron ocultadas con el fin de evitar se conozca el orden de magnitud de la adulteración.

El PBI oficial al día de hoy, resulta de la adición de un componente medido y otro componente adulterado En el gráfico adjunto, se puede observar la evolución de la brecha entre el PBI medido y el PBI imputado. En Septiembre 2008 cuando el auge económico llegó a su nivel más alto, el PBI imputado tuvo una brecha de dos puntos respecto al PBI medido, el cual se origina en  los cambios metodológicos aplicados desde 2006, pero cuando la crisis mundial empieza a impactar en nuestro país, el PBI imputado comienza a crecer aceleradamente para ocultar la recesión en el Perú, por ello mientras la cifra oficial de crecimiento para el 2009 es de 1%, la real fue de -3%.

Cuando el crecimiento de la economía se recupera, tenemos que el PBI imputado se empieza a desacelerar y, por ejemplo, en enero de este año la brecha con el PBI medido es poco más de un punto. Pero como ya los efectos de la crisis internacional se empiezan a sentir, tenemos que la adulteración empezó y los resultados de Septiembre muestran una adulteración de cerca de 3 puntos. Y los resultados oficiales entregados hace dos días, que hablan de un crecimiento anual de la economía de 8% son en realidad de 6%.

Mientras este diseño de adulteración de las cifras fue creado premeditadamente en la administración García, resulta curioso que la presente administración Humala lo mantenga. Cuando en la “Hoja de Ruta” se prometió explícitamente “Autonomía y Fortalecimiento del INEI”, pero todo parece indicar que en promesa se quedará.