Chrysler se acogerá a la protección contra bancarrota y formará alianza con Fiat

El presidente estadounidense Barack Obama confirmó que Chrysler LLC solicitará el jueves protección bajo el Capítulo 11 de la ley de bancarrota de Estados Unidos, con lo que dio inicio a lo que el Gobierno predice será un proceso de reestructuración de 30 a 60 días de la tercera mayor fabricante de automóviles de Estados Unidos.

Al mismo tiempo, Chrysler formará una alianza con la fabricante automotriz italiana Fiat SpA, señaló Obama en una conferencia de prensa realizada a mediodía. El mandatario añadió que la alianza no sólo permitirá que Chrysler sobreviva "sino que también prospere".

El Gobierno de Estados Unidos entregará hasta US$8.000 millones adicionales en ayuda, incluidos hasta US$3.500 millones del denominado financiamiento de deudor en posesión, para garantizar que Chrysler sobreviva al histórico proceso de reestructuración.

El Gobierno tenía la esperanza de mantener a la automotriz fuera de los tribunales de quiebra, pero decidió que era la única opción luego que un acuerdo para reducir la deuda de la empresa fuera rechazado tarde el miércoles por varios acreedores de la empresa, dijo un alto funcionario de Gobierno.

El presidente Obama sostuvo que Chrysler ha sido "un pilar" de la economía industrial, pero que la empresa se adaptó muy lentamente al cambiante mercado.

A cambio de la ayuda, el Gobierno de Estados Unidos asumirá una pequeña participación del capital de la nueva empresa, que pertenecerá en parte a Fiat. Según documentos de la Casa Blanca, el Departamento del Tesoro de Estados Unidos poseerá un 8% en la entidad reestructurada, mientras que Fiat tendrá un 20% y los Gobierno de Canadá y Ontario recibirán el 2%.

El Gobierno estadounidense tendrá la facultad de designar a miembros de la junta directiva de la nueva empresa, pero no se involucrará en las operaciones cotidianas, señaló un funcionario del Gobierno.

La entrada a la protección por bancarrota es parte de un acuerdo forjado a lo largo del mes pasado por parte del Departamento del Tesoro que dará los toques finales a una sociedad entre Chrysler y Fiat. La participación de 20% de Fiat podría incrementarse a 35% si la nueva compañía cumple con las metas necesarias para asegurar el desarrollo en EE.UU. de vehículos con consumo eficiente de combustible.

Los funcionarios dicen que no se contemplan nuevos despidos en Chrysler, pero dijeron que con el tiempo la base de concesionarios se reducirá.

También como parte del acuerdo, el brazo de financiación de Chrysler. Chrysler Financial, será fusionado con GMAC LLC, que se convertirá en la principal fuente de financiación para todos los vehículos de Chrysler.

Funcionarios del gobierno dicen que esperan un proceso de quiebra "quirúrgica" para Chrysler, con buena parte del trabajo de reorganización basado en lo alcanzado por la fuerza de trabajo de la industria automotriz.

Esas bases incluyen un acuerdo de recorte de costos ratificado por el sindicato United Auto Workers en la noche del miércoles. Otro pacto forjado por el Tesoro implica que los prestamistas acepten US$2.250 millones en efectivo a cambio de renunciar a US$6.900 millones de deuda de Chrysler. Algunos acreedores rechazaron esa oferta, pero funcionarios del gobierno dijeron que esperan que el juez de quiebras mantenga intactos esos acuerdos.

Los nuevos préstamos del gobierno incluyen entre US$3.000 millones y US$3.500 millones en la llamada financiación de deudor en posesión y US$4.500 millones más una vez que la empresa salga de la protección por quiebra, dijeron funcionarios del gobierno el jueves.

El equipo especial para el sector automotriz del Gobierno trabajó el miércoles hasta la noche para lograr que los 46 acreedores de Chrysler –aceptaran el acuerdo de reducción de deuda hasta que colapsaron las negociaciones.

"Después de un mes de negociaciones incansables, el gobierno contaba en la tarde de ayer con el apoyo de los principales participantes en Chrysler, incluyendo a la UAW y los mayores acreedores", dijo el funcionario. "Ese apoyo se mantiene".

"Aunque el Gobierno estaba dispuesto a dar a los acreedores que se han abstenido una oportunidad final para hacer lo correcto, el acuerdo de todas las otras partes interesadas clave garantiza que ningún fondo de cobertura pueda tener un veto sobre el éxito futuro de Chrysler", dijo el jueves un funcionario del Gobierno.

Los funcionarios, que se han preparado por semanas para una posible quiebra de Chrysler, dicen que todas las piezas están en su sitio para llevar a la empresa a través de la corte de quiebras rápidamente, quizás en cuestión de semanas.


AUTOR :Josh Mitchell y Henry J. Pulizzi
FUENTE : WALL STREET JOURNAL

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