IDE Suma cero
Por German Alarco Tosoni
La inversión directa extranjera (IDE) es importante como complemento a la inversión privada de origen nacional. Ambas son útiles para contribuir a incrementar la capacidad productiva y la demanda al momento en que ésta se realiza.
Recientemente la Comisión Económica de América Latina y del Caribe (CEPAL) acaba de emitir su informe anual con información al cierre del 2011. Asimismo, ya se publicó la estadística del BCRP sobre el tema. En lo positivo, la entrada de capitales en 2011 fue mayor a los años anteriores, tanto para América Latina (US$ 153,448 millones) como para el Perú (US$ 8,233 millones según el BCRP). Sin embargo, las sorpresas son diversas cuando se realiza un análisis detallado y un balance de lo ocurrido en el Perú entre 1980-2011.
CEPAL señala que la IDE se ajusta a la estructura productiva de cada país y que los proyectos en sectores de alta tecnología son escasos. Asimismo, la creciente repatriación de utilidades, que en algunos países ha alcanzado niveles similares a las corrientes de entrada, recuerda que la IDE no es un flujo unidireccional y refuerza la urgencia de concentrarse en la calidad de la inversión para promover el cambio estructural, la transferencia de conocimiento o el incremento de las capacidades locales. También comentan las políticas de Brasil, de apoyar a través de créditos del Banco Nacional para el Desarrollo Económico (BNDES) la expansión de las empresas Brasileñas en el exterior. México, Colombia y Chile están iniciando estas actividades promocionales, pero sin proporcionar recursos financieros.
De acuerdo al BCRP, el balance contable no es muy positivo para el Perú. Entre 1980 y 2011, la IDE sumó US$ 64,669 millones, pero la nueva inversión (sin reinversiones) ascendió a sólo US$ 32,385 millones. Las utilidades generadas en el mismo periodo fueron US$ 67,461.8 millones, equivalentes a 2.1 veces la inversión efectiva realizada. Se trata de una inversión muy rentable, ya que han obtenido el doble de lo que invirtieron. Por otra parte, el balance de divisas fue negativo para el país, ya que ingresaron US$ 32,385 millones y salieron como remesas al exterior US$ 35,178 millones. Tampoco somos tan atractivos como se piensa, ya que la IDE per cápita del Perú fue de US$ 263.4 frente a US$ 310.4 de América del Sur en 2011. En este indicador nos ganó Brasil, Chile, Colombia y Uruguay.
No es objetable que la IDE sea tan rentable en el Perú. Hay que atraer inversión extranjera de mayor calidad y que contribuya a transformar la estructura económica del país, acumular conocimientos, apoye el desarrollo de sectores estratégicos, incremente el total y la calidad del empleo, como sostiene la CEPAL.
La inversión directa extranjera (IDE) es importante como complemento a la inversión privada de origen nacional. Ambas son útiles para contribuir a incrementar la capacidad productiva y la demanda al momento en que ésta se realiza.
Recientemente la Comisión Económica de América Latina y del Caribe (CEPAL) acaba de emitir su informe anual con información al cierre del 2011. Asimismo, ya se publicó la estadística del BCRP sobre el tema. En lo positivo, la entrada de capitales en 2011 fue mayor a los años anteriores, tanto para América Latina (US$ 153,448 millones) como para el Perú (US$ 8,233 millones según el BCRP). Sin embargo, las sorpresas son diversas cuando se realiza un análisis detallado y un balance de lo ocurrido en el Perú entre 1980-2011.
CEPAL señala que la IDE se ajusta a la estructura productiva de cada país y que los proyectos en sectores de alta tecnología son escasos. Asimismo, la creciente repatriación de utilidades, que en algunos países ha alcanzado niveles similares a las corrientes de entrada, recuerda que la IDE no es un flujo unidireccional y refuerza la urgencia de concentrarse en la calidad de la inversión para promover el cambio estructural, la transferencia de conocimiento o el incremento de las capacidades locales. También comentan las políticas de Brasil, de apoyar a través de créditos del Banco Nacional para el Desarrollo Económico (BNDES) la expansión de las empresas Brasileñas en el exterior. México, Colombia y Chile están iniciando estas actividades promocionales, pero sin proporcionar recursos financieros.
De acuerdo al BCRP, el balance contable no es muy positivo para el Perú. Entre 1980 y 2011, la IDE sumó US$ 64,669 millones, pero la nueva inversión (sin reinversiones) ascendió a sólo US$ 32,385 millones. Las utilidades generadas en el mismo periodo fueron US$ 67,461.8 millones, equivalentes a 2.1 veces la inversión efectiva realizada. Se trata de una inversión muy rentable, ya que han obtenido el doble de lo que invirtieron. Por otra parte, el balance de divisas fue negativo para el país, ya que ingresaron US$ 32,385 millones y salieron como remesas al exterior US$ 35,178 millones. Tampoco somos tan atractivos como se piensa, ya que la IDE per cápita del Perú fue de US$ 263.4 frente a US$ 310.4 de América del Sur en 2011. En este indicador nos ganó Brasil, Chile, Colombia y Uruguay.
No es objetable que la IDE sea tan rentable en el Perú. Hay que atraer inversión extranjera de mayor calidad y que contribuya a transformar la estructura económica del país, acumular conocimientos, apoye el desarrollo de sectores estratégicos, incremente el total y la calidad del empleo, como sostiene la CEPAL.
Comentarios